miércoles, 14 de marzo de 2012

El taller: Cómo hacer tu propio peluche

Material necesario para hacer tu peluche:
Calcetines
Relleno de cojín (guata)
Hilo de un color similar al de los calcetines
Aguja
Cuentas esféricas
Tijeras






Paso 1: Recortar el cuerpo del peluche
El primer paso para hacer tu muñeco de peluche es recortar el calcetín con el que vamos a hacer el cuerpo del peluche. En nuestro caso, hemos elegido el de color rosa. Lo doblaremos de tal forma que el talón quede centrado en la parte de arriba, ya que éste será la cara de nuestro peluche. Cortaremos en forma redondeada para obtener algo parecido a la imagen a continuación.


Resultado 1: Calcetín una vez separado el cuerpo de los brazos
Con el trozo de la izquierda crearemos el cuerpo del muñeco, mientras que aprovecharemos el trozo de la derecha de la imagen para hacerle los brazos más adelante.






Paso 2: Coser y rellenar
Ahora debemos coser la cabeza del muñeco y solo dejaremos sin coser la parte del culo, para poder rellenarlo con la gualta.
Antes de nada, dale la vuelta al calcetín de forma que la parte "fea" quede hacia fuera. Cose todo el contorno que ha quedado abierto cerca del talón del calcetín. Te aconsejo que dejes medio centímetro de margen entre el borde y las puntadas para que quede mejor acabado. Nosotros utilizamos el "punto atrás".
Una vez cosido, vuelve a dar la vuelta al calcetín y rellenalo hasta que te guste su tacto. Dale buena salud ¡Que no parezca desnutrido pero tampoco obeso! ;)
Ahora toca cerrarlo del culo. Para ello cose bién cerca del borde de la goma del calcetín. Utiliza un punto de hilván y da un par de vueltas al contorno de la goma apretándolo para que se vaya cerrando, asegúralo bién y ya tenemos el cuerpo de nuestro peluche.


Paso 3 y 4: Ponerle cara
A continuación le pondremos cara, pobrecito, que ya está deseando ver su nuevo hogar... Los brazos se los coseremos en último lugar para evitar que el hilo se nos vaya quedando enganchado en ellos cuando le cosemos los ojos, nariz y boca.
Para ello, utiliza las dos cuentas. Primero pasa el hilo a través de la cara del muñeco y inserta pasa la cuenta a través de la aguja. Vuelve a atravesar la cabeza hacia el otro extremo y ensarta la otra cuenta. Repite la operación un par de veces, tira bién del hilo para que las cuentas queden un poco hundidas en la cara y asegúralo.

Para nariz y boca elije un color de hilo que contraste con el calcetín. En nuestro caso utilizamos un hilo azul oscuro. Cosiendo con cuidado, haz un triángulo primero para la nariz y a continuación tres puntadas: una en vertical y dos en horizontal para la boca. Asegúralo bien para que no se suelte el hilo y... ¡voilà! ¡Tu peluche ya tiene carita!





Resultado 2: Ya tenemos el cuerpo de nuestro peluche
¡Que cara más graciosa! Según hayas cosido la boca y los ojos el peluche tendrá un carácter o otro: inteligente, feliz, bobo, pícaro...
Ahora vamos a ponerle los brazos...






Paso 5 y 6: Cortamos y cosemos los brazos
Cogemos el otro trozo de calcetín que hemos dejado apartado y lo cortamos por la mitad tal como se ve en la fotografía. Hay que darle la vuelta a los brazos antes de coser, tal y como habíamos hecho con el cuerpo y reservar medio centímetro del borde al coser. Utilizamos el "punto atrás" de nuevo y una vez cosidos les damos la vuelta otra vez.
Cosemos los brazos al cuerpo a una altura razonable utilizando utilizando un punto diagonal. No importa si el hilo queda a la vista. En parte ese es el encanto del peluche que estamos haciendo, totalmente artesanal.



Paso 7: Cortamos y cosemos el gorrito
De otro calcetín que combine bién con el del peluche, utilizamos un trozo de unos 10 cm. de altura para hacer el gorro. Córtalo primero y luego recorta una parte en forma de "v" en el lado opuesto al de la goma. Dale la vuelta, con la parte fea hacia fuera y cóselo todo excepto la goma (por ahí meterá la cabeza el peluche).
Utiliza el "punto atrás". Una vez cosido dale la vuelta y coloca el gorrito en la cabeza del peluche para que no tenga frío. ¡Que contento se le ve!



Resultado final
¡Tachaaaán! Ya tienes tu peluche, hecho con tus propias manos. Piensa que un regalo artesanal es uno de los regalos más originales que se pueden hacer. Lo apreciarán un montón y lo recordarán toda la vida.

¡Y gustan a grandes y a pequeños, así que el "triunfo" está asegurado!
                           



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